La campaña publicitaria para promover el libro "Las cuatro estaciones" se basará en una estrategia de marketing de guerrilla, un tipo de publicidad que sale de los esquemas tradicionales, para penetrar directamente en la ciudad y conocer gente de una manera provocativa e inquietante.

La guerrilla llega al consumidor en los momentos y en los lugares donde su "conciencia publicitaria" no está activa (como ocurre frente al televisor o escuchando la radio), es cuando se reducen sus defensas contra los mensajes publicitarios.

Intrigantes, intrigantes e implicantes son los efectos que la guerrilla produce sobre sus "víctimas". De hecho, la guerrilla se puede encontrar en las calles, en las paredes y en los bancos.

​

 

Manuel Carbone